El 8 de marzo es el Día de la Mujer Trabajadora, una ocasión perfecta para hacer un repaso de algunos temas que han visto la luz en los últimos años y que reivindican el imprescindible papel de la mujer en todos los ámbitos de la vida. Porque aunque todavía permanezcan algunos vestigios de la sociedad machista de la que venimos, cada vez hablar de los derechos de la mujer en España empieza a ser más innecesario gracias a la toma de conciencia de que todos somos iguales.
Aunque aún quedan muchas cosas por las que gritar, como el bajo índice de mujeres en cargos de responsabilidad o la inexcusable tasa de maltrato machista. Por ello hoy vamos a aprovechar para gritar por la mujer. Pero gritaremos cantando.
‘Up Here’ de Terra Naomi. ¿Cuantas veces una mujer -o también un hombre- debería haber dicho “Soy como soy, y si no te gusta que te jodan, tío“? Eso es precisamente lo que dijo Terra Naomi en ‘Up here’, uno de los singles de su disco debut. Aunque no tuvo mucho éxito, la fuerza del tema y la arrolladora personalidad de la cantante quedaron plasmadas en este tema sobre la necesidad de quererse a una misma por encima de lo que digan o piensen los demás -”voy a ser exactamente como soy, y si no te gusta es tu problema”-.
‘Big Girl (You Are Beautiful)’ de Mika. Sobre quererse a una misma también habla Mika en este single de ‘Live in Cartoon Motion’. Pero más que sobre la personalidad, lo hace sobre el físico, hablando de las “mujeres reales” con ”curvas en los sitios correctos”. A base de pizza y coca cola light, el libano-inglés realiza una crítica muy acertada sobre los cánones de belleza actuales que impulsan a las chicas a pasarse la vida a dieta. Y como dice a lo largo del tema, la belleza está por todas partes.
‘Superwoman’ de Alicia Keys. El título del tercer álbum de la neoyorquina, ‘As I am’, ya desprendía cierta intención de amor propio, pero es sin duda con este tema -ensombrecido por el alcance mundial del hit ‘No One’- el que supone el personal himno feminista de Alicia Keys. ‘Superwoman’ hace referencia a todas las mujeres -madres, hermanas- que luchan su día a día por salir adelante. “Incluso cuando soy un desastre, me pongo mi vestido con una S en el pecho, porque soy una supermujer”.
‘Not Ready To Make Nice’ de Dixie Chicks. Este tema no supone precisamente un himno sobre la fortaleza de las mujeres en general, pero sí lo es sobre los ovarios que las tres componentes de la banda tuvieron para dar la cara y enfrentarse a las amenazas de muerte que recibieron tras criticar la actuación del Gobierno de George Bush en relación a la guerra de Iraq. ”Es una triste historia cuando una madre tiene que enseñar a su hija a odiar a perfectos extraños. ¿Como las palabras que dije pueden hacer a alguien enviarme una carta diciendo que mejor me calle y cante o mi vida habrá acabado?”. Su valentía fue reconocida posteriormente con 5 Grammys por ese disco incluyendo a esta como la mejor canción. Todo un ejemplo a seguir.
‘Princesa de cuento’ de Vega. La cordobesa Vega incluyó en su tercer disco, ‘Metamorfosis’ esta divertida burla hacia los cuentos de hadas que hablan de princesas y príncipes y desmontó con ironía las historias idealizadas de mujeres esperando ser rescatadas. “No, no es para mí ser la cenicienta de un cuento sin buen fin“, cantaba, demostrando que antes de rendirse a los brazos de cualquier otro, prefiere ser feliz viviendo su vida a su manera. Y si es cantando, mejor para nosotros.
‘Belle of the boulevard’ de Dashboard Confessional. El grupo que compuso la banda sonora de ‘Spiderman’ ha hecho después otros temas tan recomendables como este. Además de la buena factura técnica del vídeo, la canción supone una crítica velada a la prostitución que la vida de tantas y tantas mujeres destroza. Tomando el caso de “la bella del boulevard”, la bamda canta la necesidad que tiene de secar sus lágrimas, guardárselo todo dentro y reprimir sus sentimientos mientras fuera del bar “el sonido de una guitarra la está salvando del hundimiento“. Triste pero realista, esta es una lucha a la que se enfrentan muchas mujeres a diario.
‘Ana‘ de Supersubmarina. Esta banda produce uno de los sonidos más característicos y prometedores de la escena musical española actual. En ‘Ana’, uno de los mejores temas de su debut ‘Electroviral’, cuentan la historia de una mujer que se ha caído muchas veces pero que ha tenido la fuerza para levantarse otras tantas. “Tú cuidado con lo que dices que está hecha de cicatrices. Es el verbo en carne viva, es la mujer elegida“, dicen sobre ella, para culminar el estribillo con “Vive tu vida tu también, cuídate, tú cuídate, Ana siempre estará bien”. Otro ejemplo del innato afán de superación que poseen las mujeres.
’22′ de Lily Allen. Las letras de esta inglesa no tienen desperdicio, igual les canta a sus ex porque la tienen pequeña que hace una crítica brutal de la sociedad. Eso es lo que hace en ’22′, donde cuenta sobre una mujer con 30 años que “es triste pero cierto cómo la sociedad dice que su vida ha terminado. No hay nada que hacer ni que decir hasta que aparezca el hombre de sus sueños“. Esta visión pesimista de la realidad de la mujer, tal vez sea hoy un poco alejada en el mundo occidental, pero es casi imposible no reflexionar sobre cómo las costumbres hacen ir en muchas ocasiones a las mujeres -y también a los hombres- por un camino que ellas no han elegido.
‘Girls Just Wanna Have Fun’ de Russian Red. Muchos se han atrevido con este clásico de Cyndi Lauper, como Miley Cyrus, Angy o incluso los chicos de ‘Glee’, pero ninguna ha sido capaz de superar a la original. Sin embargo ha habido bandas que han hecho buenas versiones del tema, como The Killers, que la cantaron en directo durante un concierto, o Russian Red, que incluyó en su debut ‘I love your glasses’ una versión más folkie y adorable, aunque a decir verdad se perdió un poco ese espíritu de desenfreno y diversión adolescente que desprendía el incontestable hit de los 80.
‘Run the world (Girls)’ de Beyoncé. Ya lo intentó con ‘Single Ladies (Put a ring on it)’, pero el primer single de ’4′, a pesar del poco éxito que tuvo en las listas de éxitos, es el himno feminista definitivo. Porque solo Beyoncé ha sido capaz de plasmar en un vídeo una batalla ficticia de hombres y mujeres donde el mayor arma de ellas es el de sus bailes y sus movimientos sensuales sin caer en el ridículo, si no todo lo contrario. Y además porque habla más claro que nunca para reivindicar el legítimo derecho de la mujer en dominar un mundo dirigido en su mayoría por hombres. Tal vez nos iría mejor. ¡Girls!
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